jueves, 19 de abril de 2012

Castor (Punta Castore)[2/2], una espina clavada...de 4228m. El ref. Quintino Sella...y la retirada. 03-04/04/12

Segunda parte [...viene de aquí].





.Día 2.Mar3Abril2012.Casotto (P. sup. di Bettolina)-Ref. Quintino Sella.

Resumen de la ruta
Inicio: P. sup. di Bettolina (3139m)
Final: Refugio Quintino Sella (3585m)
Distancia: 2km
Desnivel de subida: 450m
Desnivel de bajada: 0m
Tiempo: 3h30 (paradas incluidas)

Sin muchas prisas (ninguna), nos levantamos a más de 3100 metros. Ya ha amanecido, y un enorme mar de nubes nos da los buenos días...


...cubriéndolo todo con un manto esponjoso...




Hacia arriba, ahora vemos el camino un poco más claro. Sin saberlo nosotros, esta será la unica ventana de buen tiempo que tengamos, y nosotros tan abajo...


...pero eso si, sin palabras (pinchar para ampliar).


...observando la Punta Bettolina, el Monte Rothorn y Testa Grigia (de este último no estoy seguro pero por su posición...)...


...mientras las nubes suben y bajan...


...pero de momento parece que nos dan tregua. Desayunamos, recogemos la tienda, hacemos las mochilas e iniciamos el ascenso, esta vez por la cara este de la cresta. Sin complicarnos mucho la vida, encontramos unas huellas de esquí y las seguimos...


...para llegar en algo más de media hora a una pequeña plataforma situada a los pies de un pico sin nombre...que sí. Es el que ascendimos ayer. Con cara de "mecagoentodo" (con perdón), nos damos cuenta de que el camino pasa a escasos 30 metros del pico. Con que la niebla nos hubiese dado una tregua de diez segundos, habríamos reconocido el camino a seguir, y probablemente a estas horas estaríamos hoy en la cima del Castor. Bueno claro...otra cosa hubiese sido descender esa pared con las mochilas a cuestas.


No nos queda otra cosa que seguir adelante, esperando tener otra oportunidad. El mar de nubes va subiendo irremediablemente, pero su cosa buena tiene. Impresionante es decir poco...


Dejando atrás nuestro pico sin nombre...


...sorteando las formaciones rocosas que sobresalen por encima de la nieve...


...vamos encontrando la forma de seguir cerca de la cresta. Con cuidado de mirar el suelo de vez en cuando, luchando por apartar la mirada de esto. A nuestra izquierda el Breithorn -occidental, central y oriental- elevado sobre el Grande Ghiacciaio de Verra. Fijándonos bien, hasta podemos distinguir en el centro de la foto el Refugio Mezzalama, en lo alto de una cresta rocosa...


...lugares que nunca antes habíamos contemplado. Muy diferente a lo que estamos acostumbrados (incluso viviendo en Innsbruck)...


Hago una panorámica, aunque difícilmente estos paisajes salgan de mi mente (pinchar para ampliar).


Después de todo, subimos contentos. ¡Menudo día se ha quedado!


Pero no será por mucho tiempo más...


...rodeando unas enormes palas de nieve...


...los Lyskamm aparecen una vez más ante nosotros...


...así como el Castor, con su pared rocosa...


...y mientras las nubes nos empiezan a cubrir una vez más...



...accedemos a la última parte de la cresta. La zona de las cuerdas fijas.


Hay nieve para parar un tren, y huellas de dos o tres personas, así que no somos los primeros locos de la temporada. Al menos eso nos alivia...


...pero aún así, decidimos ponernos los arneses y llevar preparado un cordino con mosquetón, para dar seguridad si se presenta algún paso complicado.


Sin mayores problemas, llegamos al que sería el peor paso de todos, salvado por un puente de madera que elimina toda dificultad.


Aún así, ascendemos lentamente, prestando atención a cada paso que damos. Mejor no tener un traspiés...


Después del puente, la pendiente se acentúa...


...y para entonces la nubes ya se nos han echado encima...


...pero con casi otra media hora de ascensión, sin necesidad de utilizar los cordinos en ningún momento...


...llegamos al final de la cresta, y con ella al Refugio Quintino Sella.


Obviamente, aquí no hay nadie. Nos acercamos al refugio de invierno, compuesto de una pequeña sala común, una cocina y la habitación de las literas, con capacidad para 30 personas y dejamos todo lo que llevamos. El resto del día lo pasaremos descansando...


...comiendo, bebiendo (hay un par de bombonas grandes de gas para la cocina)...


...y practicando algunos movimientos (entre ellos encordarnos...pues no está mal decir que está sería la primera vez que atravesamos un glaciar, o que hacemos una cima de más de cuatromil metros). En el refugio encontramos diversas cosas que nos harán la vida más fácil, como mantas, una estufa de gas un poco cascada, un sillón...y periódicos. Que aunque parezca una tontería, bendito sea quien dejase ahí los periódicos, al darnos cuenta de que nuestras reservas de papel higiénico eran casi nulas jaja.

Mientras tanto, y muy a nuestro pesar, el tiempo va a peor....y se pone a nevar. Con ganas.


Sin mucho que hacer aparte de matar el tiempo, preparamos todo el material para el día de cima...


...y tempranito tempranito, nos vamos a la cama rezando porque el tiempo nos deje hacer algo...


.Día 3.Mie4Abril2012.Ref. Quintino Sella-S. Anna (Staffal).

Resumen de la ruta
Inicio: Refugio Quintino Sella (3585m)
Final: S. Anna (2172m)
Distancia: 9km
Desnivel de subida: 50m
Desnivel de bajada: 1450m
Tiempo: 5h (paradas incluidas)

Suena el despertador a las 4:00 de la mañana. Iván y Alejandro, malas pécoras, se hacen los dormidos y al final me levanto yo a mirar por la pequeña ventana de la habitación. Apenas veo el suelo con la niebla. Pero lo que si veo son los enormes copos que caen. Ale, vuelta a la cama...

Suena el despertador a las 5:00 de la mañana. Esta vez ya no paso. A pringar todo el mundo jajaja. Le toca a Iván. Veo como se acerca a la ventana y como vuelve. "A dormir otra vez".

Suena el despertador a las 6:00 de la mañana. Tenemos que despertar a Alejandro, que ni se ha enterado. Es su turno. Pero todo sigue igual.

A las 7:00 el panorama no ha cambiado, y a las 8:00 desistimos. Hoy parece que no será el día de cima. A dormir de nuevo.

Cuando despertamos son más de las diez y la cosa fuera se ha puesto peor. Mientras desayunamos debatimos los pasos a seguir. Basicamente se nos presentan dos opciones. Bajar o esperar al día siguiente. Para que negarlo, estamos todos un poco nerviosos, y yo me empiezo a notar algo asustado. Durante la noche han caído unos veinte centímetros de nieve, y la parte de cuerdas fijas ya tenía un bueno taco (de hecho, en varias partes la cuerda estaba tapada), como para que le caiga más.

Aún así, prevalece la opción de esperar. Dando vueltas de un lado para otro, mirando hacia fuera, pasa lento el tiempo. A eso de las doce, la cosa se pone peor aún. Nieva con mucha fuerza, y ésta vez yo propongo bajar. No son las mejores condiciones, pero si sigue así, es mejor dejar atrás la cresta antes de que nieve más. Volvemos a debatirlo, y tenemos claro que con lo que ha caído, la idea de hacer cima se diluye casi por completo. Finalmente, decidimos bajar...


...para lo cual creemos conveniente encordarnos entre nosotros y a las cuerdas fijas.


Atravesamos varias partes en las que la cuerda ha desaparecido...


...descendiendo lentamente, sin que la nevada nos de tregua...


...con cuidado de pisar en firme en todo momento...


...sin pensar en la caída que tenemos a mano izquierda...


Al principio vamos con movimientos demasiado forzados, todos en tensión...pasando el mosquetón por todos los tramos de cuerda...


...pero poco a poco, según entramos en faena, nos vamos relajando...


...y de alguna forma, las miradas que intercambiamos delatan una buena parte de diversión.


Dejamos atrás las cuerdas...


...y volvemos a seguir las señales amarillas...


...para llegar en unas cuatro horas (de las cuales la mitad del tiempo lo empleamos saliendo de la nieve) al Collado Bettaforca.


Y a todo esto, sigue nevando. Miramos la hora y decidimos apretar el ritmo, para poder llegar al último teleférico que sale de St. Anna hacia Staffal.

Ya abajo, toca lamentarse. La decisión de bajar fue acertada, pues sigue (y seguirá) nevando copiosamente, pero aún así no podemos retener ese resquemor. Ni siquiera hemos podido intentarlo, ni siquiera hemos podido salir andando hacia el Castor. Además, inconscientemente repasamos todo lo que salió mal. El teleférico, la niebla, el mapa, nuestro juicio. Ya no tiene remedio pero..."joder, es que si hubiésemos llegado al refugio el primer día...estaba claro que ayer fué el día de cima. Buen tiempo de noche y buen tiempo por la mañana". No podemos evitarlo, y abandonamos Staffal y Gressoney con esa sensación agridulce...

Ha estado bien, hemos disfrutado, hemos dormido en tienda a 3100 metros, hemos dormido en un refugio a más altura de la que nunca antes habíamos estado, hemos visto unas cuantas maravillas, pero...

Pero...

...ese pero es lo que habrá que solucionar en verano.


Próxima parada: Zermatt.

5 comentarios:

  1. Hola Josemi e Iván.

    Ya leí la primera entrega de esta aventura y esperaba con impaciencia la segunda,creo que hicisteis bien en renunciar a la cima,porque en menudo berenjenal os visteis metidos jejeje.
    Respecto a lo que decís de que si el primer día hubieseis continuado hasta el refugio y el día que os salió bueno hubieseis hecho cima,yo creo que esa también fue una sabia decisión,y no os podéis reprochar nada.

    Un abrazo,chicos.

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  2. Eso de que "si hubiese hecho..." lo hemos dicho todos en algún momento,pero luego te das cuenta que no importa,que has disfrutado y que si tienes un rato ya volverás.
    Espectaculares imagenes de la cresta.
    Un abrazo.

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  3. ¡Menuda aventura, hay que saber echarse atrás!
    A la próxima, ¡cima!

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  4. Hola pareja.

    Impresionante subida. No os preocupéis por la cima. Yo me quedé a 500 metros de hacer cumbre en el Mont Blanc, y quiero pensar que no es una oportunidad perdida, sino que gano la oportunidad de volver para terminar la faena.

    Ánimo.

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  5. Dani, aún así, con la mañana perfecta que tuvimos ese día...que pena no haber podido hacer cima. Hubiera sido perfecto...

    Fosi, tienes toda la razón. Mejor pecar de prudente que de otra cosa jeje.

    Angel, seguro! Para este verano toca =)

    Daniel, pues mira, ya compartimos objetivo jajaja. Mejor volverse que seguir y no volver.

    Un abrazo compañeros.

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